¿Te has plantado alguna vez delante del armario y, a pesar de estar repleto, has exclamado que no tienes nada que ponerte? En realidad, no es que no tengas ropa, sino que nada de lo que tienes te sirve para ser la persona que deseas ser ese día concretamente.

La moda, como cualquier otra forma de expresión, no solo refleja nuestros gustos, también nuestro estado de ánimo e incluso la forma en que vemos la vida. Por ello, es importante contar con prendas que nos hagan sentirnos bien. A continuación, te proponemos los vestidos largos para cualquier look otoñal, así que prepara tu armario para esta temporada. ¡Vamos allá!

Las mejores opciones para utilizar tus vestidos largos este otoño

Antes de comenzar, debes saber que existen alternativas para todos los gustos y todas las formas de vestir. Así pues, hay tantas posibilidades que podrás adaptar todos tus vestidos largos para esos días en los que no sabes muy bien qué ponerte. Tanto si quieres vestir más clásica, informal, apostar por una mezcla de tendencias o aferrarte a la seguridad que ofrecen los básicos, siempre habrá un look de Street Style que se adapte a tus gustos.

La fórmula ideal para este otoño quizás sea la americana con un maxivestido. Y si quieres acertar, debes optar por un diseño fluido en color naranja, ya que es una de las tonalidades que será tendencia esta temporada. Pero además, tienes otras muchas opciones para deslumbrar. ¡Descúbrelas!

 

1. La elección más sofisticada

Si tienes una cena informal o especial y necesitas un look de noche en el último momento, un vestido negro minimalista con un largo a la altura del tobillo será lo más versátil. Y si quieres que esta opción sea además sofisticada, asegúrate de que no presente adornos superfluos, pues recuerda que menos, es más. En caso de que quieras adornar este tipo de vestidos, puedes recurrir a las joyas doradas, pues serán muy buenas aliadas, como por ejemplo un collar de eslabones.

 

2. Vestido con mangas tipo manguito

Esta es una de las tendencias menos convencionales para este otoño, aunque la hemos visto también en jerséis y tops. Las mangas tipo manguito cubren solo medio brazo, de manera que el efecto es como el de un guante largo. Sin embargo, también tiene otra alternativa: los manguitos que cubren el brazo por completo, pero en este caso no funcionan como jersey, sino como cuello.

Ambas alternativas se incluyen dentro de ese detalle especial tan buscado entre las amantes de las prendas especiales, solo que con cierta estética minimalista. El éxito de estas propuestas se refleja en el Street Style, así como en el vestuario de algunas protagonistas de tus series favoritas.

 

3. Un vestido-manta

Para las más frioleras, este tipo de vestidos son tan calentitos que el efecto será el mismo que taparse con una manta. Consiste en una prenda de punto holgado y cuello cerrado, y no solo es uno de los vestidos más cómodos de la temporada, sino también un comodín perfecto para acertar cuando no sepas qué ponerte.

Según tu estilo, puedes llevarlo con complementos de gran impacto y calzado que marque tendencia, como unos zuecos o unos mocasines. Aunque también puedes decantarte por unos zapatos más atemporales y sencillos, como unos botines de piel o unas zapatillas.

 

4. Corte romántico

Los diseños de corte romántico suelen estar confeccionados en materiales vaporosos. Además, sus colores claros y detalles especiales pueden funcionar a la perfección en tus looks más informales. En esta categoría, el elemento renovador esta temporada es el fruncido en la cintura, es decir, un efecto fajín perfecto para afinar esta parte del cuerpo sin ceñir en exceso tu figura.

 

5. El vestido satinado otoñal

El vestido satinado o slip dress es uno de los más versátiles, por lo que se ha ganado un hueco en casi cualquier armario independientemente de la época del año y el evento al que tengas que asistir. Para las amantes de las mezclas más audaces, puedes combinar este vestido con diseños de estética opuesta, como por ejemplo una cazadora tipo bomber y unas botas de goma. Eso sí, el resultado será un look de tendencia, pero no apto para las más tímidas.

 

6. Vestido acolchado

El entusiasmo por los acolchados también llega a los vestidos. Después de diversas temporadas de abrigos y bolsos con un acabado mullido, este efecto pasa a la prenda comodín de cualquier armario: el vestido acolchado con un diseño sencillo. Además, lo mejor de elegir un vestido de estas características en colores lisos es que te permite armar un conjunto equilibrado y sin excesos, pero alejado de las apuestas más habituales.

 

7. La alternativa que no pasa de moda

Un vestido de líneas rectas y tirantes anchos también es una inversión de por vida. Si el tiempo lo permite este otoño, puedes llevarlo como una sola prenda, aunque otra opción ideal para los días más fresquitos es llevarlo con un jersey de punto fino debajo o con una camiseta segunda piel. Esta fórmula de inspiración noventera es pura tendencia, y además de combatir el frío, te permitirá conseguir un look diferente.

 

8. Vestido con aberturas clave

Este otro vestido liso y largo, pero con aberturas, no puede faltar en el armario de las chicas que más saben de moda. Esta prenda se actualiza en otoño para adaptarse a la nueva estación, con mangas largas pero cortes sutiles para no dejar mucha piel al aire. Es como una versión renovada del clásico vestido de punto para que puedas desmarcarte del estilo otoñal tradicional, pero sin dejar de lado la comodidad que buscas en tu día a día.

 

9. Efecto ‘bodycon’

Por último, este tipo de vestido tampoco debería faltar en el vestidor de todas aquellas chicas que quieran ir a la última. Y es que se ajusta a la figura para destacar las curvas, una alternativa ideal a los diseños tan holgados con los que muchas no se sienten nada identificadas.

Los fruncidos y drapeados que se distribuyen a lo largo de esta prenda ayudan a remarcar y suavizar la silueta, pero enfatizando la zona del busto y la cadera. Si quieres apostar por uno de estos modelos, procura que esté confeccionado con un material elástico para que te permita caminar con facilidad. ¿Preparada para deslumbrar este otoño?