No. Te aseguro que no. No estaba exagerando cuando nombraba este artículo como «Anna Wintour, la mujer más poderosa de la industria de la moda«. Te aseguro que así es, ¿quién hay, sino, más influyente que ella en la moda contemporánea? ¡Ojo! En la moda contemporánea: fuera de ésta, podríamos mencionar a otras grandes visionarias de la moda, como Diana Vreeland. Pero, en la moda contemporánea… Oh, Anna gana. Y te diré más… Fíjate si será influyente, que muchos en el mundo de la moda la conocen como «Nuclear Wintour«, ¿por qué crees que será?
La mujer más poderosa de la industria de la moda (contemporánea), Anna Wintour.
Si tuviésemos que salir a la calle con un micrófono a encuestar a las personas sobre Anna Wintour, nos encontraríamos ante una serie contrariedad. Y, ¿sabes por qué? Porque no sabríamos si Anna Wintour es más conocida por su visión única y estelar de la moda, o bien por su fría y calculada (aparente) forma de ser. Hasta hubo quien realizó una película inspirándose en ella. Y es que El Diablo Viste de Prada es una clara realidad de cómo se actúa dentro de los pasillos del buque insignia de la casa editorial Condé Nast. Nada más te hará falta verte The September Issue acto seguido de El Diablo Viste de Prada, y sabrás de lo que te hablo.Pero, sin embargo, nadie puede negar la visionaria mente de Anna, quien, a sus sesenta y pocos años ya ha logrado cosas únicas e irrepetibles.
Hablemos un poquito de ella, y de cómo llego a ser quien es hoy: la mujer más influyente de la moda contemporánea.
Anna nació en Londres en un invernal 3 de noviembre de 1949, siendo hija de Charles Wintour y Eleanor Trego Baker. A muy temprana edad decidió estudiar periodismo y entrar al mercado laboral de éste a sus 20 años, cuando fue contratada por la revista Harper’s & Queen. Unos años más tarde, Harper’s Bazaar quiso contar con su talento, y la hizo moverse a Nueva York. Una vez en La Gran Manzana, llegó a ella lo que hoy es, lo que diríamos, su segunda casa: Vogue, donde la ficharon en 1983 como responsable creativa. Pero antes de colocarse como Directora oficialísima de la revista, Anna regresó a la capital británica para ponerse al mando de la revista House & Garden, donde duró un año, antes de regresar a la Gran Manzana -en 1988-.
Hoy, ya lleva prácticamente 30 años al frente de conocida Biblia de la Moda (Vogue), pero… ¿Sabías qué? Te contaré algo: “En el primer número de septiembre que hice yo, cuando quiera que fuese eso, puse a Naomi Campbell en la portada. Recuerdo que en esa época teníamos que enseñar la revista a la dirección. Cuando se la mostré se hizo un silencio total, porque no podían creer que hubiese puesto a una modelo afroamericana en la portada del número de septiembre –el que más páginas y más anuncios tiene, la verdadera biblia del diseño de la temporada–. Entonces se consideró muy arriesgado”, declaraba Anna, recordando aquel entonces.
En estos 30 años, Anna ha logrado impactar a todo el mundo, colocando en portada celebridades tan dispares como Hillary Clinton o la mismísima Kim Kardashian. Pero también, buscando siempre elevar la moda a la categoría de arte y elegancia.
Pero, además de su impecable talento artístico, ella misma en su conjunto también impacta a todo el mundo: su tradicional corte «bob» (que, según algunas lenguas dicen, lleva con ella desde lo 14 años) hasta su incomparable estilo a la hora de vestir. ¿Sabías que odia con todas sus fuerzas, y que nunca se pondría ninguna prenda de color negro? Así es Anna Wintour… y así es como la admiramos.
