Vivimos en un mundo que cada día es más consciente con el medio ambiente y cuyo objetivo es el de reducir todo lo posible la basura y demás residuos, por eso mismo han aparecido en el panorama las bragas menstruales.

Las bragas menstruales o bragas para la regla son unas prendas de ropa interior especialmente fabricadas para recoger el flujo menstrual durante los días que dure la regla.

De este modo, nos prometen ser la mejor alternativa posible para llevar puestas durante todo el día o toda la noche, ya que suelen aguantar sin ningún problema entre 8 y 12 horas sin llegar a manchar la ropa y sin llegar a incomodarte.

¿Cómo funcionan?

Es lógico que lo primero que se nos puede venir a la cabeza cuando pensamos en usar una bragas para la menstruación es el miedo a poder manchar la ropa cuando ya no absorban más. Pero la mejor noticia, es que están fabricadas para que esto no pase.

Las bragas menstruales contienen varias capas, elaboradas todas ellas con tejidos especiales para poder absorber flujos a la vez que evitan cualquier fuga:

  • Primera capa: se encuentra en contacto total con la piel, puede ser de algodón o de otro tejido drenante para así poder evitar la sensación incómoda de humedad.
  • Segunda capa: esta capa está fabricada con tejido absorbente, que nos asegura retener lo mismo que dos tampones.
  • Tercera capa: la última capa está compuesta por un tejido impermeable y a la vez transpirable para así evitar pérdidas, normalmente suele ser de poliéster y poliuretano.

Cuando las bragas menstruales ya no absorben más, es cuando comenzamos a notar la humedad, por lo que se nota que ha llegado el momento de cambiarlas.

¿Qué pros y contras tienen las bragas menstruales?

Su precio es sin duda una de las grandes ventajas que nos ofrecen las bragas menstruales, y es que, a la larga, suelen ser muy económicas. Su precio suele rondar los 25-30 euros, pero comprando dos o tres pares nos podremos ahorrar los gastos que pueden suponer los tampones y compresas de dos años.

Su comodidad es otra ventaja que debemos destacar, y es que prácticamente no es necesario cambiarse en todo el día con la gran calidad y comodidad que nos ofrecen.

Si tuviéramos que destacar un inconveniente, sería que hay que lavarlas siguiendo unas pautas de recomendación del fabricante, una vez se hayan utilizado, y es muy importante lavarlas tal como nos indican para que así se puedan conservar sus propiedades más tiempo. En general, es aconsejable lavar las bragas de menstruación con un jabón neutro que no contenga suavizantes y debemos hacerlo siempre con agua fría.

Las bragas menstruales son el futuro de la protección íntima, ahora que ya conocemos su uso y sus ventajas, también es importante saber dónde podemos encontrarlas y asegurarnos que serán una compra de calidad.

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