Hablar de moda en verano siempre es hablar de frescura, de ganas de estrenar, de encontrar esa prenda que no solo nos sienta bien sino que además conecta con la temporada. El 2025 no es una excepción y las pasarelas ya habían avisado hace meses de por dónde iban a ir los tiros, pero ahora, con el mes de agosto en pleno apogeo, es el momento en el que esas tendencias se materializan en las tiendas, se hacen visibles en la calle y se convierten en una guía real para vestir sin dar demasiadas vueltas frente al espejo.

El Corte Inglés, Mango, Zara, Stradivarius, Parfois, Reserved o Hoss Intropia han apostado por propuestas claras y asequibles, y lo interesante es que muchas de ellas recuperan clásicos con un aire renovado. El polo, la blusa con bordados, la falda plisada o incluso las prendas oversize aparecen en escena pero no tal cual las conocíamos, sino con un giro que las hace sentir actuales. Otras, como los colores de temporada, marcan el camino hacia un armario que se atreve con el verde o con el amarillo mantequilla, tonos que a priori parecen arriesgados pero que se están consolidando como básicos de este verano.

El regreso del polo, el poder de las blusas y la fiebre del verde

Si hay una prenda que ha resucitado con fuerza es el polo. Lejos de quedar relegado al recuerdo de los uniformes escolares o al look preppy de los años 90, esta prenda se ha convertido en un icono de la temporada. Desde los desfiles de firmas como Ralph Lauren, Casablanca, Lacoste, Miu Miu, Gabriela Hearst, AMI, Loewe, Acne Studios y Marimekko, hasta su llegada a las estanterías de El Corte Inglés con modelos de punto en oferta, el polo ha recuperado su lugar como pieza clave. Lo interesante es que ahora se lleva de manera relajada, combinado con faldas plisadas, bermudas o incluso con pantalones fluidos, alejándose del aire rígido que tuvo durante años. Un polo de punto se convierte en una prenda versátil que da juego tanto para un look de oficina como para una cena al aire libre en agosto.

Junto a él, las blusas con detalles delicados como bordados, encajes y volantes se han situado en el top de las preferencias femeninas. Esta tendencia aporta un aire romántico y femenino a cualquier conjunto. Lo que antes podía considerarse un detalle excesivo, hoy se interpreta como un guiño de frescura. Firmas como Polín et moi lo saben bien y han apostado por blusas que se convierten en protagonistas absolutas del armario estival. Son prendas que funcionan tanto con un vaquero clásico como con un pantalón de lino, y que permiten jugar con la moda sin complicaciones, adaptándose a distintos estilos y edades.

El color verde también es protagonista indiscutible. Mango lo ha señalado como el tono estrella y no es casualidad, este color transmite energía y frescura, pero al mismo tiempo aporta serenidad. Lo mejor es que se adapta a una amplia gama de prendas, desde vestidos midi hasta complementos. Apostar por el verde en pleno agosto es dar un paso seguro hacia un armario que se actualiza sin necesidad de cambios radicales. Quien todavía no ha introducido este tono en su fondo de armario tiene ahora la oportunidad de hacerlo con propuestas accesibles que combinan perfectamente con otros colores neutros o incluso con tonos más intensos.

Las bermudas se han consolidado como una pieza esencial. No hablamos solo de las versiones clásicas, sino de las bermudas XL, de corte alto y largo hasta la rodilla, que estilizan la figura y aportan comodidad. Parfois las incluye en su colección como una prenda estrella del verano 2025, y los expertos en imagen coinciden en que son una opción perfecta para quienes buscan un look práctico, fresco y al mismo tiempo estiloso. El corte de tiro alto es favorecedor y funciona con sandalias planas, con tacones bajos o incluso con zapatillas deportivas, lo que multiplica sus posibilidades de uso.

El amarillo mantequilla aparece como otro de los tonos clave de la temporada. Este color suave pero llamativo al mismo tiempo se posiciona como una alternativa interesante al clásico blanco o al beige que dominan los meses de calor. Zara lo ha incluido en pantalones anchos que se convierten en piezas estrella de la colección estival. La clave está en cómo se combina, ya que el amarillo mantequilla encaja con una amplia paleta cromática, desde verdes y rojos hasta naranjas y tonos más neutros como el azul marino o el café. Es un color que ilumina, que rejuvenece y que aporta un aire positivo, ideal para los días largos de verano.

La falda plisada también regresa con fuerza. Lejos de parecer anticuada, este 2025 se reinventa con colores claros y cortes favorecedores. Reserved ha apostado por modelos en azul claro que transmiten frescura y elegancia a la vez. La falda plisada es uno de esos básicos que, aunque desaparece por temporadas, siempre vuelve porque tiene la capacidad de estilizar, de ser cómoda y de ofrecer combinaciones infinitas. Con una camiseta sencilla y unas sandalias planas, la falda plisada se convierte en un look perfecto para cualquier ocasión veraniega.

Oversize, estilo boho y la comodidad como bandera

Más allá de colores y detalles femeninos, la comodidad se ha convertido en un factor determinante en la moda actual. Las prendas oversize se han consolidado como tendencia gracias a su capacidad de ofrecer libertad de movimiento y frescura sin renunciar al estilo. Camisas largas, blazers amplias y pantalones de pierna ancha están dominando los armarios. Stradivarius, por ejemplo, ha lanzado camisas oversize en tonos marrón chocolate que, además de ser tendencia, resultan frescas gracias a tejidos como el lino. Esta mezcla de practicidad y moda es lo que hace que la propuesta oversize sea tan atractiva. Ya no se trata solo de una estética relajada, sino de una elección inteligente para sobrellevar el calor del verano sin perder estilo.

El estilo boho también ha regresado con fuerza en esta primavera-verano 2025 y continúa en agosto como una de las propuestas más potentes. Este estilo, que apuesta por la autenticidad y la libertad, se ha reinterpretado con un aire actual. Hoss Intropia, por ejemplo, ha presentado chalecos bordados que rescatan la esencia bohemia pero con un toque moderno, ideales para quienes buscan diferenciarse sin caer en lo excesivo. El boho 2025 no es un disfraz de festival, es una forma de vestir que transmite personalidad, que conecta con lo natural y que se adapta fácilmente al día a día.

La suma de estas ocho tendencias demuestra que la moda de verano de 2025 se mueve entre la tradición y la innovación. El polo y la falda plisada son ejemplos de cómo los clásicos pueden reinventarse, mientras que el verde y el amarillo mantequilla muestran la fuerza del color como protagonista absoluto de los armarios. Las bermudas XL y las prendas oversize reflejan la importancia de la comodidad, mientras que las blusas con detalles delicados y el estilo boho ponen el acento en la feminidad y la autenticidad.

No hace falta abrazar todas las tendencias al mismo tiempo, basta con elegir las que encajen con tu estilo personal y con tu día a día. Lo interesante de este verano es que las opciones son variadas y accesibles, lo que permite a cada persona construir un armario funcional y a la vez actual. Agosto de 2025 se convierte así en un mes donde la moda no es una imposición, sino una invitación a experimentar, a jugar con colores, con cortes, con detalles, y a encontrar ese equilibrio entre estilo, comodidad y frescura que tanto buscamos cuando las temperaturas suben.