Como bien sabemos quienes seguimos las tendencias que marca la moda, temporada a temporada, este sector tiene una gran ventaja: es cíclico. Todas las tendencias, tejidos, texturas y colores que han pasado de moda, con el transcurso de los años, vuelven a marcar tendencia, y hay prendas a las que les tenemos cariño y de las que no nos queremos deshacer.
En estos tiempos, la crisis económica, el COVID y el confinamiento, han hecho que agudicemos el ingenio para reciclar y aprovechar prendas que marcaron tendencia en otras temporadas, y renovar nuestro vestuario.
Y la mujer de la calle no es la única. Muchas celebrities y royals son capaces de renovarse y reutilizar prendas que ya habían lucido en otros eventos. Aunque veamos que repitan falda o vestido, han sabido crear un outfit distinto, fresco y que marca tendencia. Y nosotras, en casa, y con prendas que son de otras temporadas, también podemos hacerlo y triunfar, en lugar de deshacernos de ellas.
Un buen fondo de armario, imprescindible para conseguir nuestro objetivo de estar siempre a la última
Lo que conocemos como fondo de armario es una de los mejores trucos para reciclar y combinar prendas, y darles un toque más actual. Hay básicos imprescindibles, prendas que se pueden utilizar para combinar con aquellas que no son de temporada, pero que harán que luzcamos un aspecto renovado.
Es muy recomendable contar con alguna blusa blanca, un jersey de color crudo, alguna chaqueta tweed, pantalones clásicos o faldas lápiz, y algún que otro pantalón vaquero que nos quede como un guante. Teniendo en el armario este tipo de básicos, podremos crear looks nuevos con prendas que ya no marquen tendencia en una determinada temporada.
Una misma prenda puede tener funciones diferentes, y vestirnos tanto en verano como en invierno. No debemos renunciar a tener varios vestidos en nuestro fondo de armario, puesto que los vestidos veraniegos, especialmente los de tirantes, dan mucho juego para combinarlos en cualquier época del año. Un vestido veraniego, por ejemplo, se puede reutilizar en invierno si se reconvierte en falda, con un jersey grueso por encima, o simplemente utilizándolo como pichi en entretiempo, con una blusa o un jersey por debajo. Este look es muy boho y favorecedor, y se le saca mucho partido si los vestidos son de colores lisos y monocromáticos.
Los tonos neutros combinan bien con todo tipo de ropa
Invertir en tonos neutros es uno de los mejores trucos para poder reutilizar prendas, ponérnoslas una y otra vez con básicos o con colores que combinan bien, y que no se note que repetimos. Hay ejemplos muy prácticos del día a día. Un traje de color azul marino o gris puede convertirse en un clásico en nuestro armario, al que siempre se le puede dar un toque diferente, llevando el pantalón o la chaqueta por separado, y combinándolo con una falda midi, un jersey de cuello alto, zapato plano o un zapato de tacón más elegante, y complementos más llamativos si llevamos el traje completo. En muchas ocasiones, siempre será llevaremos el mismo conjunto, pero con nuestro toque personal parecerá que el traje es nuevo.
Los negros, grises, blancos, colores nudes o crudos, o los azules oscuros, suelen combinar a la perfección con cualquier tipo de color y con prendas nuevas o pasadas de moda que tengamos en nuestro armario. Este tipo de colores son muy versátiles y podemos darle una segunda vida a ciertas prendas que no nos poníamos desde hace tiempo.
Customizar prendas que han pasado de moda o que ya hemos lucido en múltiples ocasiones
Customizar prendas para que parezcan diferentes, también es una gran opción para no deshacernos de ropa que es de buena calidad y que tiene salidas, dando la impresión de que no repetimos. Si nos hemos aburrido de lucir determinadas camisetas, sudaderas, blusas o cazadoras de corte clásico, éstas se pueden decorar para que resulten diferentes.
Todas estas prendas se pueden pintar, introduciendo un cartón dentro para no manchar la parte de abajo, y pintando con pintura especial para telas. Podemos dar rienda suelta a nuestra imaginación o bien hacer un estampado con alguna trama de pintura que nos guste. Nuestras prendas favoritas se transformarán de una forma original, y podremos darles una segunda oportunidad para nuestro día a día. Y si tenemos facilidad para manejar pinturas y pinceles, disfrutaremos realizando el cambio nosotras mismas.
Otra prenda que se presta mucho a los cambios son las camisetas. Todas tenemos en nuestro armario múltiples camisetas que ya no nos ponemos, o que sencillamente han pasado de moda. Hay muchas formas de darles una segunda oportunidad, como el Tye-Dye, que nunca pasa de moda y es perfecto para un look casual. El proceso pasa por mancharlas con lejía y darles un toque con agua, tapando algunas partes para crear formas irregulares. También se pueden rasgar por la parte de la espalda, o pintar con pintura para tela, o añadirles algún detalle con encajes en zonas estratégicas, o bien abalorios para ropa. Nuestras camisetas no parecerán las mismas, y podremos volver a lucirlas otra temporada.
Los vaqueros son también una prenda muy versátil para poder reformarla y customizarla a nuestro gusto. Aprovechando algún vaquero que está más viejo o que ya no está de moda, podemos cortarlo y hacer un short para los meses de verano, y aprovechar el resto de la tela para crear con nuestras propias manos un bolso o una mochila original.
Hay otras formas de dar un toque renovado a nuestros viejos vaqueros, como añadir lunares con tinta para tela, y utilizando un lápiz con goma. Sumergiendo la goma en tina, y estampándola en zonas estratégicas del vaquero, conseguiremos darle un toque novedoso a una prenda que ya no nos apetecía ponernos. Además, se pueden añadir encajes, flecos o volantes, y también parches con los motivos que más nos gusten. Los vaqueros son prendas que se prestan a muchos toques especiales, y que se pueden customizar de forma muy fácil, para darles un toque renovado, que siga marcando tendencia.