A simple vista, parece que lo tiene todo: es guapa, famosa y divierte al mundo con su música. Pero también a simple vista demuestra que lo que es la moda, precisamente, no se le da tan bien que digamos… Y yo me pregunto: ¿es que con tanto éxito no puedes «comprarte» el don del estilo? Comprarlo no sé, pero desde luego que a esta muchacha la fama la ha convertido en toda una CRIMINAL DE LA MODA.
Adora la ropa futurista y los lazos gigantes, pasar de ser una muñeca de porcelana a un auténtico robot y no sabe lo que significa enfundarse en un buen par de jeans… Le gusta provocar, mostrar sus encantos al máximo y hacer caso omiso de las críticas del resto del mundo… Eso sí, hay que reconocer que es única! Me recuerda a Chris Aguilera en sus tiempos mozos, pero llevada al extremo.
En el fondo la entiendo, si es que como decía Oscar Wilde: «Solo hay una cosa peor que hablen de ti, y es que no hablen»