Seguro que en más de una ocasión habréis utilizado el agua micelar para limpiaros la piel o visto algún anuncio en televisión de este producto. En muy poco tiempo se ha convertido en uno de los grandes pesos pesados de la belleza y que cambia por completo el ritual de limpieza de nuestra piel.
¿Qué es el agua micelar?
Comencemos explicando que son las micelas. Se trata de partículas microscópicas que tienen una importante capacidad limpiadora así como propiedades para atrapar restos de maquillaje, sebo o cualquier otra clase de impureza de la piel.
Esto es una importante ventaja para dejar la piel completamente limpia cuando llegamos a casa o nos vamos a acostar, para así poder dejar la piel descansar y regenerarse de manera natural.
Es un producto diferente a los desmaquillantes que todas conocemos, los cuales contienen agua y aceite. En este caso el agua micelar, como su propia palabra indica, tiene una base de agua, lo que nos permitirá retirar muy fácil este producto sin que deje ningún rastro.
Este producto destaca por tener muchas ventajas frente a otros de similares características. Por ejemplo, es muy bien tolerado por la piel, pudiendo ser aplicado en aquellas que muestran más sensibilidad gracias a los tensioactivos tan suaves con los que cuenta.
Al contrario de lo que sucede con los desmaquillantes comunes, que suelen estar formulados para determinada clase de piel, el agua micelar puede ser utilizada tanto en toda clase de pieles, tanto si tienen tendencia a resecarse o a ser demasiado grasas.
Por otro lado, hay que destacar que aquellas aguas micelares más completas cuentan en su composición con complejos hidratantes, aminoácidos, lactatos y urea que hacen que la piel adquiera una mayor hidratación y sensación de frescura, algo que no sucede con cualquier otra clase de productos desmaquillantes.
Es muy fácil de aplicar con un pequeño disco de algodón. Hay que distribuir bien el producto por todo el rostro y después aclarar la piel con bastante agua, con lo que quitaremos el máximo de impurezas que pueda tener la piel.
Además, puede ser utilizado todos los días, tanto para aplicarlo por la mañana como por la noche, independientemente de si la piel está maquillada o no.
También puede aplicarse en los ojos dado que sus componentes no provocan irritaciones, lo que lo convierte en un producto estupendo para retirar sombras, máscaras, correctores, delineadores, etc.
Y tú… ¿ya has probado el agua micelar?