Uno de los principales trucos para mantener una alimentación sana y equilibrada y además mantener nuestra forma física es cuidar nuestra hidratación. Es necesario que cada día bebamos unos dos litros de agua para mantener esos niveles de hidratación en unos buenos niveles. ¿Pero que diríais si además de hidrataros y de cuidar vuestra línea hubiese alguna bebida con muchas más propiedades?

No, no nos hemos vuelto locos. Aunque normalmente para cuidarnos e hidratarnos bebamos esas cantidades de agua que hemos indicado, lo cierto es que también debemos y podemos tomar otra clase de bebidas que nos aportan numerosos beneficios. Ejemplo de ello es el té. Tomar una o dos infusiones diarias de alguno de los diferentes tipos de té nos ayuda a mejorar en muchos aspectos.

Propiedades del té verde

Por ejemplo, el té verde es uno de los que más beneficios nos aportan. Tomar té verde regularmente nos ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares, a reducir el dolor de huesos y fortalecerlos, previene las intoxicaciones alimentarias, alivia el asma, aumenta la capacidad de nuestra memoria y además nos ayuda a evitar la obesidad e incluso a adelgazar combinando estas infusiones de té verde con una alimentación equilibrada y ejercicio físico.

Otro de los mayores propiedades del té verde es que reduce considerablemente el estrés, lo que también consigue que nos relajemos más y nos sintamos menos cansados y mucho menos pesados.

Propiedades del té rojo

Pero el té verde no es el único que nos aporta grandes ventajas y beneficios para nuestra salud. Por su parte, el té rojo nos ayuda a hacer la digestión con mayor facilidad y ayuda a nuestra flora intestinal a funcionar correctamente gracias a su función diurética, por lo que el té rojo también es muy recomendable para las personas que quieran adelgazar.